Fuego israelí deja al menos 50 muertos en Gaza, cerca de centro de ayuda respaldado por EE.UU.

Foto: Saeed M.M.T. Jaras | Anadolu, Pinture Alliancia, ciudadanos buscan refugio en Gasa.                          

Al menos 50 personas murieron el lunes en Gaza como resultado de un nuevo episodio de fuego israelí, según informó el Ministerio de Salud del enclave palestino. Cerca de la mitad de las víctimas se encontraban en las inmediaciones de un centro de distribución de ayuda humanitaria operado por la Fundación Humanitaria de Gaza, una organización respaldada por Estados Unidos. El hecho ha suscitado una oleada de condenas y cuestionamientos sobre la estrategia israelí para facilitar la ayuda en medio del conflicto.

Testigos en el lugar relataron escenas de caos, gritos y cuerpos ensangrentados tras el ataque, que ocurrió mientras cientos de personas hacían fila para recibir alimentos y suministros básicos. El Ministerio de Salud señaló que entre las víctimas había mujeres, niños y adultos mayores, muchos de los cuales ya se encontraban en condiciones de extrema vulnerabilidad. Hasta el momento, el Ejército israelí no ha emitido un comunicado oficial aclarando las circunstancias del ataque.

Este nuevo episodio se suma a una larga serie de bombardeos y operaciones terrestres que han dejado miles de muertos en Gaza desde el recrudecimiento de las hostilidades a finales de 2023. Organismos internacionales han denunciado de forma reiterada que los corredores humanitarios establecidos no son seguros ni suficientes para la magnitud de la crisis humanitaria que vive la Franja. Las recientes muertes ocurridas cerca del centro de ayuda han intensificado estas preocupaciones.

Altos funcionarios de la ONU han criticado duramente el modelo de entrega de ayuda respaldado por Israel, calificándolo de "inseguro, improvisado y contrario al derecho internacional humanitario". Martin Griffiths, subsecretario general para Asuntos Humanitarios, sostuvo que “la ayuda no puede ser distribuida en condiciones de fuego cruzado” y pidió garantías inmediatas de protección para los civiles y los trabajadores humanitarios en terreno.

La Fundación Humanitaria de Gaza, financiada en parte por fondos estadounidenses, también expresó su indignación por el ataque y afirmó que sus operaciones se realizan en coordinación con agencias internacionales y bajo protocolos previamente informados a las autoridades israelíes. “Este ataque no solo pone en riesgo nuestras operaciones, sino que socava los principios fundamentales del trabajo humanitario”, expresó la organización en un comunicado.

En Washington, el Departamento de Estado dijo estar “profundamente consternado” por los informes y exigió una investigación inmediata. Varios legisladores demócratas han instado a la administración Biden a reevaluar el respaldo militar a Israel ante lo que consideran una conducta “desproporcionada y moralmente inaceptable”. Por su parte, el gobierno israelí ha defendido su derecho a actuar contra amenazas de seguridad, aunque no ha dado una versión oficial de este hecho en particular.

Mientras tanto, la población de Gaza continúa enfrentando una catástrofe humanitaria sin precedentes: escasez de alimentos, hospitales colapsados y más de un millón de desplazados internos. La comunidad internacional sigue reclamando un cese al fuego inmediato, garantías de acceso humanitario y una solución política duradera al conflicto. Sin embargo, los hechos del lunes dejan claro que la violencia sigue escalando, con consecuencias devastadoras para la población civil.